Siete contradicciones entre Alves y la joven provocaron el vuelco: un relato “no fiable” y pruebas que “dan una escasa e insuficiente fortaleza” a la acusacin
El Tribunal Superior de Justicia de Catalua (TSJC) corrige la condena contra Dani Alves y lo absuelve por la violacin de una joven en el bao del reservado de la discoteca Sutton de Barcelona. Un varapalo importante a los magistrados de la Audiencia Provincial que juzgaron al futbolista brasileo en el primer gran caso bajo el paraguas de la Ley del solo s es s.
La sala del TSJC, integrada por Mara ngels Vivas, Roser Bach, Mara Jess Manzano y Manuel lvarez, revoca ahora por unanimidad la sentencia de cuatro aos y medio de crcel al considerar que no hay pruebas de la agresin sexual del ex futbolista y que el testimonio de la demandante no es fiable. Adems, considera que la resolucin de la Audiencia de Barcelona que conden al brasileo adolece de vacos, imprecisiones, inconsistencias y contradicciones y presenta dficits valorativos que impiden compartir la valoracin del tribunal de instancia y la conclusin a la que llega.
El fallo condenatorio de 2024 de cuatro aos y medio de crcel consider probado que el ex futbolista penetr a la chica sin su consentimiento y con violencia. Ahora, la nueva sentencia del caso modifica el relato de hechos, rechaza que Alves agrediera sexualmente a la joven y se limita a considerar probado que el deportista y la joven mantuvieron relaciones sexuales en el bao del reservado de la discoteca tras desgranar hasta siete “contradicciones” e “imprecisiones” en una resolucin de 101 pginas.
Una de las claves de la sentencia absolutoria -que se puede recurrir al Supremo, algo que la defensa de la denunciante y la Fiscala estudian- es la falta de fiabilidad que los magistrados dan al testimonio de la chica. Para absolver a Alves, la sala de apelaciones del Tribunal Superior de Justicia de Catalua cuestiona la versin de la joven, asegura que no es fiable y se sustenta en el relato que hizo de lo sucedido en el reservado de la discoteca, donde s haba cmaras: la chica dijo que Alves las abord y que ella y sus amigas estaban incmodas en todo momento, pero en los vdeos se vea al grupo bailando y tomando copas durante 20 minutos antes de que ellos dos entraran al bao.
Estas contradicciones no impedan dar credibilidad a la joven respecto a la agresin sexual posterior del bao, donde no haba cmaras, segn recalcaron los jueces en la primera sentencia de la Audiencia. En cambio, para el TSJC esto no es no es as y ahora considera que la divergencia entre lo relatado por la denunciante y lo realmente sucedido compromete gravemente la fiabilidad de su relato, y lo hace de una forma muy relevante. Es decir, duda del testimonio de la denunciante por su descripcin sobre lo ocurrido antes y despus del bao.
En opinin del TSJC, la sentencia de la Audiencia tambin presenta dficits valorativos muy relevantes, puesto que no ha extremado las cautelas al contrastar un relato -calificado ahora de no fiable- de la joven con las pruebas biolgicas (ADN) y dactiloscpicas (huellas) practicadas. Segn el tribunal, la distribucin de estas huellas puede concordar tanto con la declaracin del acusado en cuanto a la felacin, excluida por la sentencia, como con lo que ella dice que se apoy en la taza del wter. Tambin asegura que por los restos de ADN encontrados en la boca de la chica puede deducirse que hubo una felacin con alta probabilidad, como dijo Alves y neg la joven.
Adems, la Seccin de Apelaciones aade que la herida que la chica tena en la rodilla pudo producirse en el pequeo espacio de muchas formas, como admiten todos los forenses y profesionales. En conclusin, la consecuencia de no dar por probada la felacin a la que asocia la violencia de la cada y lesin, y la ubicacin de ADN en la boca de la denunciante, y el hallazgo y ubicacin de las huellas dactilares y palmares en la tapa del retrete en su parte ms cercana a la cisterna y en la misma cisterna, dejan el relato de la agresin sexual por la que se ha condenado apoyada nicamente en el relato de la denunciante, al que se aade un elemento ms de incerteza; evidenciando la escasa e insuficiente fortaleza de la hiptesis acusatoria, seala del TSJC.
Y reitera: La sentencia de instancia al no dar por probada la felacin desactiva tambin la violencia que le atribuy para lograrla y asla o reduce la agresin al hecho de la penetracin vaginal, que sustenta solo en la declaracin de la denunciante, debilitando la hiptesis acusatoria.
Sobre el testimonio de las amigas de la denunciante, la sala tilda de totalmente inexactas sus declaraciones, especialmente respecto al ambiente de incomodidad que describen en el reservado de la discoteca, pese a que permanecieron durante veinte minutos hablando, bailando y tomando copas. Tambin esgrime el TSJC la amistosa despedida de una de ellas -no de la denunciante, con la que Alves no medi palabra al salir del bao- y el amigo del futbolista, con quien se enviaron varios mensajes despus de los hechos.
Sobre las imgenes grabadas por una cmara que llevaba el mosso que atendi a la chica, los jueces aseguran no se puede deducir el efecto corroborador que le atribuye la Audiencia de Barcelona a la chica, que repiti me ha hecho mucho dao y se ha corrrido dentro. De la grabacin se constata que ste (el agente) le dice que ella es la vctima, que no ha de sentirse culpable, le hace preguntas sobre los hechos sin que la denunciante concrete la agresin sexual […]. Son conversaciones genricas sobre su estado de angustia, pero en ningn momento se vincula con el hecho concreto ni se hace referencia al mismo, concluye el TSJC.
Tampoco tiene relevancia para la sala la prueba pericial que sostiene que la vctima sufre estrs postraumtico tras lo sucedido ya que el informe no es concluyente ni determina en qu proporcin los sntomas proceden de los hechos o del estrs ambiental posterior
El tribunal insiste en que no afirma en su sentencia que la hiptesis verdadera sea la que mantiene la defensa del acusado, quien se aferra a que la relacin sexual fue consentida, pero subraya que las pruebas expuestas en el juicio no han superado los estndares que exige la presuncin de inocencia de acuerdo con las directivas europeas y el Consejo de Europa.
En el juicio, Alves asegur que las relaciones sexuales fueron consentidas despus de haber cambiado de versin varias veces en sus declaraciones previas. La vista oral se celebr del 5 al 7 de febrero de 2024 en Barcelona y la sentencia condenatoria se hizo pblica a los pocos das. La Audiencia le concedi la libertad provisional a la espera de que se resolvieran los recursos en marzo del ao pasado.