La Audiencia Nacional absuelve a Camps en el último juicio que tenía pendiente el ex presidente valenciano

La Audiencia Nacional ha absuelto al ex presidente de la Generalitat valenciana Francisco Camps por la última rama del caso Gürtel que tenía abierta. “No existe prueba o indicio alguno de orden, sugerencia o intromisión del Sr. Camps en dicha contratación”, dice el tribunal en referencia a las adjudicaciones a la trama de Francisco Correa.

Esta decisión supone que el ex presidente valenciano ha resultado exonerado de la decena de causas abiertas contra él, resultado, según la defensa de Camps en este último juicio, de “una obsesión psicopatológica” de la Fiscalía contra el ex presidente autonómico. En este último juicio, Anticorrupción pedía para él un año de cárcel y seis de inhabilitación por tráfico de influencias en concurso con prevaricación.

El tribunal sí condena a los considerados cabecillas de la trama, encabezada por Francisco Correa, al haberse conformado con las penas que acordaron con la Fiscalía. En una sentencia de 232 folios que llega siete meses después de concluido el juicio, la Sala les impone las penas pactadas, de hasta dos años y tres meses de cárcel por delitos de prevaricación administrativa, falsedad en documento mercantil y malversación de caudales públicos.

Además de a Camps, el Tribunal también absuelve a varios consellers y funcionarios por las contrataciones de 2004 a 2009, entre ellas las de Fitur y el Open de Tenis.

En relación con Fitur, la sentencia resalta la ausencia de “indicio alguno” de su participación en la contratación. “Es más, no existe testigo, escrito o comunicación alguna entre ambos en dicho periodo lo que aleja cualquier prueba o indicio con trascendencia penal”, se añade.

‘EL BIGOTES’

La sentencia también resuelve sobre el alcance de las relaciones de Álvaro Pérez, el Bigotes, con Camps. “Más allá de la opinión de terceras personas y de las escasas escuchas telefónicas entre ambos, durante Navidades, y que el propio Camps Ortiz fuera a actos de celebración personales del Sr. Pérez, de ello no puede deducirse en absoluto que el Sr. Camps fuera responsable de todos los actos del Sr. Pérez o que favoreciera las actividades del mismo dentro del ámbito de la contratación pública”, dicen los magistrados José Antonio Mora (ponente), Fernando Andreu y Teresa García.

Durante el juicio, el líder de la trama resaltó la relación de Camps con el Bigotes, lo que llegó a provocar un enfrentamiento verbal en la sala. El tribunal se queda más cerca de la versión del ex dirigente popular.

“Las manifestaciones del entorno de la empresa Orange Market y del Sr. Correa, en el sentido de que Pérez Alonso se instaló en Valencia por su amistad con Camps Ortiz deben evaluarse con mucha precaución, pues una cosa es fundamentar en una relación de amistad profesional una expectativa de negocio, y otra muy diferente, que el Sr. Camps fuera consciente de ello y que el mismo lo alentara, pues ni se acusa ni se acredita en modo alguno que el Sr. Camps tuviera connivencia ni en lo personal ni en lo económico con empresa alguna del Sr. Correa o participara en alguno de sus beneficios o alentara dichas actividades”, afirman los magistrados.

En el juicio, el ex secretario general del PP valenciano Ricardo Costa declaró que existía “el compromiso” de que todos los actos del PP valenciano los realizara Orange Market, y atribuyó ese compromiso a Camps por su relación con el Bigotes. La sentencia recuerda que Costa hizo mención de “una comida en la propia sede de la Generalitat” en la que se habló de ese acuerdo.

“No cabe deducir de una simple comida la intervención en serias irregularidades administrativas […]. La jurisprudencia está llena de casos de comidas entre funcionarios y autoridades, con distintas personas e incluso letrados intervinientes sin que por ello quepa deducir que el funcionario adoptara resoluciones irregulares”, indica la sentencia.

Respecto a las otras contrataciones realizadas por las distintas consejerías, la resolución de la Audiencia analiza la responsabilidad en la contratación de los distintos consellers, de sus jefes de gabinete y de los respectivos directores generales, para concluir quiénes fueron los responsables de las distintas contrataciones con Orange Market y las otras empresas del grupo Correa.

En concreto, la sentencia estudia uno a uno los contratos en los que participaron y su adaptación a la legislación de la época, recogiendo la forma de trabajo en las distintas consellerías y quiénes eran los responsables de la contratación, así como la forma en que se procedía posteriormente al pago de las distintas facturas, examinando la legislación de la época sobre contratos menores. El Tribunal llega a la conclusión de que estos últimos no eran responsables, ni tenían el dominio del hecho de los distintos contratos adjudicados a las empresas del grupo Correa, en especial a Orange Market.