El mensaje de Snchez para calmar a los empresarios ante la guerra arancelaria de Trump: “Hay dinero para afrontarlo”
Hubo que cambiar agendas. Suspender almuerzos o reuniones. Hay quien tuvo problemas para contactar y confirmar, dada la premura. Fue una convocatoria rpida, sin mucho margen, la del pasado jueves en La Moncloa, donde Pedro Snchez convoc a los sectores afectados por los aranceles anunciados por Donald Trump -automocin, agroalimentario, industria ligera y pesada, farmacutico, entre otros-. Una vez finalizado el acto pblico, las sillas que poblaban la sala fueron rpidamente quitadas y los periodistas invitados a salir. Los asistentes tuvieron oportunidad de, en un ambiente ms relajado con un cctel de por medio, departir con el presidente del Gobierno y los hasta ocho ministros presentes en el acto. Hubo una ausencia que llam la atencin de los asistentes: la de la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, Mara Jess Montero.
Apagadas las cmaras y los micros, los representantes del tejido productivo tuvieron oportunidad de trasladar los ruegos, inquietudes, sugerencias… que no pudieron durante el acto oficial. En conversaciones distendidas a varias bandas, el jefe del Ejecutivo y sus ministros “prometieron dilogo”. “Nos dijeron que iban a abrir un dilogo con los sectores porque los aranceles pueden ser una carga muy grande para las empresas”, trasladan varios de los asistentes consultados por EL MUNDO.
En esta suerte de tercer tiempo, Snchez, y tambin sus ministros, se esforzaron por trasladar tranquilidad a los afectados. “Nos dijeron que estuvisemos tranquilos, que iban a dar una respuesta”; “Estaban tranquilos y queran trasladar tranquilidad”; “Parecan controlar el asunto”, dicen los asistentes. Un esfuerzo del Gobierno por dar certidumbres, tambin econmicas: “Hay dinero para intentar afrontar esto”, les traslad jefe del Ejecutivo. Snchez anunci un plan para movilizar 14.100 millones, reciclando 6.700 de instrumentos financieros ya existentes.
Sin embargo, entre los sectores afectados hay incredulidad hasta ver “cmo llegan esas ayudas”. “Hay que ver cmo se ejecuta lo prometido”, dice uno de los asistentes. “Lo importante es ver cmo llega el dinero, que estamos acostumbrados a cantos de sirena”, expone otro.
De momento, desde Unesid, la Unin de Empresas Siderrgicas, alertan de que pueden verse afectados directamente ms de 60.000 trabajadores directos del sector. La Federacin Espaola del Vino advierte de que estn en riesgo 400 millones de exportaciones de vino espaol. En la Federacin Nacional de la Construccin (CNC) estiman un impacto de 500 millones a la exportacin de materiales de Espaa a EEUU. Por su parte, desde la Federacin Nacional de Comunidades de Regantes (Fenacore) insisten en la necesidad de una respuesta “contundente y proporcionada” y poner el foco en el sector agroalimentario.
Al encuentro del jueves en La Moncloa, adems de Snchez, asistieron la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Daz; la vicepresidenta tercera y ministra para la Transicin Ecolgica, Sara Aagesen; el ministro de Transportes, scar Puente; el ministro de Industria, Jordi Hereu; el ministro de Agricultura, Pesca y Alimentacin, Luis Planas; el ministro de Economa, Carlos Cuerpo; la ministra de Sanidad, Mnica Garca, y el ministro para la Transformacin Digital, scar Lpez. Como ha quedado dicho, no acudi Montero. “Llam la atencin, porque si hablamos de aranceles quien los quita, los pone o los cobra es Hacienda”. Nadie se atrevi a preguntar por su ausencia.
Snchez se comprometi a otra reunin con el sector primario y los ministros sealaron el propsito de hacer “seguimiento exhaustivo a cada sector”. “Esperamos y deseamos que as sea”, dicen los afectados.