Arcuri denuncia en Italia la sustraccin por Juana Rivas del hijo menor de ambos, Daniel, y ella se reafirma en que “se queda”
Francesco Arcuri ha denunciado ante los tribunales penales de Cagliari, en Cerdea, la sustraccin internacional de su hijo menor, Daniel, por su madre, la granadina Juana Rivas, segn ha sabido EL MUNDO. La denuncia llega una semana despus de que expirara la fecha en que el menor, prximo a cumplir 11 aos y en custodia exclusiva de su padre, deba ser retornado por su madre con Arcuri al hogar paternofilial, en la localidad de Carloforte.
El tribunal civil de Cagliari orden por dos ocasiones, los das 2 y 8 de febrero, el regreso del nio con su padre, pero la madre consigui, valindose de denuncias de abusos del padre sobre el menor que el tribunal italiano vio inconsistentes, una suspensin de dicha orden por parte de los tribunales espaoles.
Dicha suspensin se produjo el 7 de enero, por parte del juzgado de Instruccin 4 de Granada, que tom declaracin al menor y le vio “serio y convincente” al narrar supuestos abusos, pero no obstante se inhibi en Violencia contra la Mujer 2 de la misma ciudad, al entender que las competencias deban ser de ste. Violencia 2, en cambio, archiv las denuncias de la madre por no ver indicios de delito en el padre, y zanj que es Italia quien, en todo caso, debera estudiar dichas denuncias, por haberse producido los supuestos hechos en suelo italiano.
Sin embargo el nio, atrapado en un limbo legal y ya “escolarizado” por la va exprs segn los abogados de su madre, contina en Granada, lejos del progenitor que mantiene su custodia exclusiva segn los tribunales italianos. El letrado de Arcuri en Italia, Serlapo Bardi, pidi a finales de la semana pasada a la corte civil de Cagliari, la que lleva ocho aos estudiando en profundidad a la familia Arcuri/Rivas, que se pronunciara sobre lo que entiende “una sustraccin evidente”.
La presidenta del tribunal le conmin entonces a contactar con la contraparte para que ambos letrados acordaran, voluntariamente, el regreso del menor a Cerdea, y le emplaz en todo caso al prximo evento judicial de relevancia en el caso: la sentencia sobre la custodia de los menores, para la cual hay una ltima vista citada este viernes, y que debera ser puesta por el tribunal la semana que viene.
Ante la realidad de que el pleito civil est prximo a llegar a su conclusin, pero el menor sigue en Granada en poder de su madre -quien este mismo mircoles ha hecho pblico un vdeo en que se reafirma en que su hijo se ha “quedado de verdad” en Espaa-, Bardi ha presentado denuncia por sustraccin internacional.
Daniel Arcuri lleg a Espaa el 22 de diciembre pasado como excepcin al rgimen que la corte de Cagliari que ahora va a decidir sobre su custodia estableci en la ltima sentencia del caso, que data de febrero de 2023. Entonces, la corte no slo estableci la custodia exclusiva en favor del padre, por considerarle el nico progenitor capaz de cuidarle, sino que determin que Rivas slo podra verle en Cerdea, y nunca en Granada, para evitar episodios de manipulacin por parte de la madre que el nio haba denunciado repetidamente a psiclogos y a la mediadora a la que el propio tribunal haba encomendado su cuidado.
Sin embargo, Rivas aleg no poder viajar a Cerdea las pasadas navidades por problemas de salud -al parecer, de espalda-, y el tribunal le permiti que su hijo, que el da 6 de diciembre le haba dicho a la mediadora que no quera viajar a Espaa y que prefera que su madre y su hermano volaran a Cerdea para verle, fue enviado por su padre a Granada.
Daniel Arcuri, como ha contado EL MUNDO, viaj con su madre con rdenes estrictas para ella por parte de la corte civil. El menor deba hablar todos los das con su padre, para que Arcuri tuviera la garanta de que estaba bien, y cada dos das se deba actualizar su situacin a la mediadora judicial, Cristiana Desogus. Ninguna de las dos cosas sucedi desde que el menor puso pie en territorio espaol y qued al cargo de su madre.
Las medidas buscaban que Rivas no pudiera inducir al nio a culpar a su padre de abusos nunca demostrados y siempre descartados por la corte civil -e incluso por la Fiscala, que sin embargo ha cambiado recientemente su postura y ve indicios de delito en Arcuri, pese a fundarse en hechos ya descartados previamente por ella misma y por los jueces-. En cuanto Daniel Arcuri qued a la proteccin de su madre, se cort toda comunicacin con el padre y comenzaron de nuevo las denuncias.
Despus de que un juzgado de Mlaga descartara malos tratos del padre en diciembre pasado, Rivas lleg a enviar a la corte civil un video de Daniel, supuestamente refiriendo de nuevo abusos. Dio igual, el tribunal se ratific en que no haba “nada nuevo”, y pidi el regreso del menor a Carloforte con su padre el 2 de enero. Los letrados de Rivas lograron finalmente que la juez de Instruccin 4 de Granada levantara dicha orden, pero despus Violencia contra la Mujer 2 dijo, otra vez, no ver indicio de delito, y remarc la competencia italiana.
El nio, no obstante, sigue en Espaa, y lejos de su padre, quien durante los ocho aos en que el tribunal civil de Carloforte se lleva ocupando del conflicto es el designado para cuidarle.
Los letrados de Rivas en Espaa han cargado, de forma poco habitual, contra la magistrada de Violencia 2 de Granada. Primero emitieron un comunicado para afearle su decisin de no ver violencia en la “veintena” de llamadas de Arcuri a Rivas para saber de su hijo, y despus, una vez 107 jueces de Violencia contra la Mujer de toda Espaa la apoyaron, solicitaron su recusacin. El Consejo General del Poder Judicial, por su parte, ha admitido a trmite este mismo mircoles una solicitud de amparo de la magistrada por estos hechos.
El caso no se ha librado tampoco de la poltica. No slo de intervenciones en redes sociales de las ministras Sira Rego y Yolanda Daz -la primera de las cuales lleg a asegurar haber “visto” al menor pidiendo no volver con su padre, a la vez que juzg como “violencia” la “veintena” de llamadas de Arcuri a Rivas pidiendo noticia de su hijo, las mismas que fueron archivadas por la juez de Violencia 2 de Granada-.
El propio Ministerio de Igualdad hizo pblica el sbado pasado una nota en la que asegur que “el inters superior del menor consiste en escuchar al hijo de Juana, tener en cuenta su opinin, garantizar su seguridad e impedir que conviva con un maltratador”.
Sin embargo, el destino de Daniel Arcuri no est claro, dado que las juezas de Instruccin 4 y Violencia contra la Mujer 2 de Granada, habiendo tenido ambas acceso a lo expresado por el menor, no se han puesto de acuerdo sobre si est siendo maltratado, o en realidad responde a nuevas manipulaciones de su madre, como las registradas durante ocho aos por el juzgado civil de Cagliari que ha estudiado a la familia.
