Un grupo de presos ‘duros’ de ETA liderado por ‘Txapote’: “La lucha tendr que continuar”, “toca inventar un nuevo movimiento de liberacin”

El sector duro de los presos de ETA tiene un mensaje muy diferente al que sostienen la izquierda abertzale, sus formaciones polticas de apoyo y la mayora de los presos de la organizacin terrorista. En un manifiesto firmado por algunos de los ms irreconducibles, dejan claro que estn en contra de la situacin actual y denuncian que se est abandonando los postulados por los que entraron en prisin.

Y advierten: “Nos toca inventar la creacin de un nuevo movimiento de liberacin , dejando de lado todo izquierdismo, dogmatismo e infantilismo”. “Las condiciones que vive actualmente el Pas Vasco auguran en general un futuro poltico dudoso”.

“Y ahora qu? Bueno, no tenemos una frmula mgica, la lucha tendr que continuar”, apuntan estos presos que marcan distancia con la dinmica y reclaman a los suyos firmeza. “Somos una brasa roja no apagada”, advierten. E insisten en que por ese motivo “consideramos importante enfatizar la continuacin de la lucha”, explican en un manifiesto publicado por la publicacin abertzale Kalabutxi.

El grupo de duros, liderado por Garca Gaztelu, Txapote, aade: “No hemos aceptado el camino de la legalidad penitenciaria y por tanto pensamos que los presos todava tenemos un papel que desempear”, arranca su texto desmarcndose de la lnea oficial.

“Creemos que nuestro cautiverio est y debe estar vinculado a la lucha de por la liberacin de nuestro pueblo”. Y defienden la “legitimidad de la lucha poltica que nos llev a la crcel”, “sin inclinarse ni arrepentirse”. “La derrota militar no debe llevarnos a la derrota poltica. Denuncian cmo las antiguas estructuras abertzales cercanas a ETA “han renunciado a la causa y se han integrado en el opresivo sistema poltico espaol”.

“Para los presos encarcelados, la represin es ms dura que nunca y ms violenta que nunca”, denuncian en ese manifiesto divulgado en los mbitos abertzales y que, segn las fuentes consultadas por EL MUNDO, tiene una importante y “preocupante” permeabilizacin en el mundo radical.

“Han pasado ms de 13 aos desde el fin del ciclo poltico caracterizado por la lucha armada y es obvio que las cosas no han mejorado, porque el opresor sigue ms opresor que nunca y el oprimido est ms oprimido que nunca”. “Pero parece que algunas personas no quieren ser conscientes de ello, porque a cada momento se habla de convivencia, de normalizacin y de paz. Visto as parece que vivimos en una verdaderamente democrtica donde la represin, presentada como una cuestin del pasado, es slo una tendencia apetecible para pocos sectores reaccionarios”, aade el texto de los presos ‘duros’ de ETA y ex etarras.

En el mbito penitenciario y de los especialistas en la lucha contra el terrorismo de ETA se hace un segumiento completo y pormenorizado de todos los movimientos de ETA, de su entorno y de los que mantienen “la brasa roja”. De ese grupo, muchos han sido expulsados del autodenominado colectivo de presos de ETA. Pero, para la seguridad del Estado (en este caso, bsicamente funcionarios de prisiones y guardias civiles) son puntos de mximo control. “Porque nunca se sabe hasta dnde puede llegar esa brasa y no nos debera pillar con el pie cambiado”, explican fuentes de este entorno. Y, adems, constatan que el seguimiento entre los movimeitos ‘ms radicales’ del mundo abertzale es muy importante, sobre todo en el mbito “ms juvenil”.

Estas mismas explican que entre los firmantes de este manifiesto estn, adems de Xabier Garca Gaztelu, Txapote, Julen Atxurra Egurola, Oskar Barreras Daz, Aitor Cotano Sinde, Oskar Gallastegui Sodupe, Fernando Garca Jodr, Beatriz Etxebarria Caballero, Daniel Pastor Alonso, Jon Kepa Preciado Izarra, Jon Mirena Sampedro Blanco y Mikel Sansebastin, entre otros.

Como apuntan estas fuentes, uno de los referentes principales de este grupo de duros es Txapote, autor material, entre otros, del asesinato del concejal del PP de Ermua Miguel ngel Blanco.

Estos especialistas constatan que el liderazgo de ‘Txapote’ dentro de este grupo de ‘disidentes’, est muy solidificado con un preocupante respaldo pblico de sus familias y el apoyo de colectivos juveniles como Jardun y, especialmente, la Gazte Koordinadora Abertzale (GKS). Por eso, su seguimiento de los expertos es intenso.

Porque junto a Txapote‘ se encontraran su cuado y compaero de mdulo en Zaballa (lava) Orkatz Gallasetegui Sodupe, otro de los considerados como hombre clave en este entramado.

Segn explican estos analistas consultados por EL MUNDO, esta declaracin multiplica los apoyos que obtuvo la media docena de etarras disidentes que en primavera de 2016 hicieron pblico su desmarque del EPPK (frente de crceles). Entienden, que en el actual escenario poltico, este posicionamiento claro y contundente contra la actuacin de la izquierda abertzale en su conjunto, con Txapote como lder, “obligar a la direccin de Otegi a mover ficha para que el desmarque no vaya a ms”.

Alertan de que estas posiciones, plasmadas de nuevo, coinciden con las posturas de lo que es o fue ETA, tratando de mantener viva la lucha armada.