Snchez refuerza la alianza con China para hacer frente a Trump
Con el imprevisible escenario geopoltico global que se abre ahora tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca, muchos focos apuntan a las turbulencias que sacudirn las relaciones entre Estados Unidos y la Unin Europea. En esta partida est por ver el papel que desempear la Espaa que Trump ubic por error en los BRICS, el grupo de economas emergentes liderado por China; la Espaa de un Pedro Snchez que parece que aspira a ser el referente del batalln antitrumpista en Europa. En este ltimo frente entrara en juego el marcado acercamiento, empujado por figuras relevantes del socialismo espaol, hacia el rgimen chino.
En Pekn echan de menos a Josep Borrell. Y eso que con el poltico cataln tuvieron unos cuantos rifirrafes en una relacin que fue como una montaa rusa durante su etapa como jefe de la poltica exterior de Bruselas. Pero los funcionarios chinos lo tenan en alta estima y apreciaban sus hbiles lecturas de los juegos de poder globales, as como su temple para saber cundo haba que presionar con vehemencia y cundo tocaba rebajar el tono.
Este guio a Borrell lo lanza una voz autorizada del Ministerio de Exteriores chino, quien comparte el pesar que tienen en la superpotencia asitica porque su sucesora haya sido la combativa Kaja Kallas, ex primera ministra de Estonia, muy firme desde el principio contra Pekn. Hay que aprender a convivir con China, ha soltado Borrell en varias entrevistas. Algunos diplomticos espaoles con experiencia en el patio chino explican que el veterano ex ministro socialista ha sido un importante gua para el Gobierno de Snchez de cara a profundizar las relaciones de Moncloa con Pekn.
Otro socialista que ha servido de puente es el ex presidente Jos Luis Rodrguez Zapatero, quien viaja asiduamente al gigante asitico para participar en conferencias y eventos promocionados por instituciones estatales chinas, donde comparte abiertamente un discurso que se asemeja a la narrativa de la propaganda china sobre el multilateralismo y el fin de Estados Unidos como potencia hegemnica. Muchos funcionarios chinos no olvidan cuando Espaa, con Zapatero al frente, apoy en 2005 el fin del embargo europeo de armas a China, vigente desde la matanza de Tiananmen, e impuls las relaciones entre la UE y el pas asitico con su proyecto de la Alianza de Civilizaciones.
Los ltimos movimientos polticos y del sector empresarial espaol apuntan hacia Pekn con el propsito de que nuestro pas sea el gran recipiente de inversiones chinas en el sur de Europa. Espaa pas de mostrarse a favor de los aranceles a los coches elctricos chinos en una primera votacin en Bruselas en 2023, a cambiar su postura -en parte por las amenazas chinas de imponer sanciones al cerdo espaol- y estar entre los 12 pases de la UE que se abstuvieron en la votacin final de 2024. La estrategia pasa por considerar que China es ms una oportunidad econmica que una amenaza, sostienen fuentes diplomticas espaolas.
El pasado septiembre, cuando Snchez estuvo de viaje oficial en China -era su segundo paseo por la segunda potencia mundial en 18 meses-, el gigante local Envision Energy acord invertir en Espaa 1.000 millones de dlares para construir un parque industrial de hidrgeno verde, una fuente de energa limpia, considerada el combustible del futuro, que puede ser clave hacia una economa ms sostenible.
La multinacional china Chery, en alianza con la marca espaola Ebro, va a poner en marcha la produccin de coches elctricos en las antiguas instalaciones de Nissan en la Zona Franca de Barcelona. En Zaragoza, la tecnolgica china CATL y el grupo Stellantis van a levantar una gigafactora que va a ser la mayor fbrica de bateras en suelo espaol.
Las autoridades chinas ven a Espaa como un pas especialmente atractivo como destino preferencial de inversiones. Hay una sintona poltica bastante mejor entre Espaa y China que la que tiene Pekn con otros pases del sur de Europa, donde se percibe a China como un factor ms controvertido polticamente, explica Mario Esteban, catedrtico de la Universidad Autnoma de Madrid, donde dirige el Centro de Estudios de Asia Oriental, e investigador principal del Real Instituto Elcano.
Espaa tambin es vista como un destino de inversin ms seguro porque aqu slo hay dos partidos polticos que tienen opcin de gobernar y ambos comparten las principales lneas de una estrategia constructiva hacia China, de intentar aprovechar las oportunidades econmicas, contina el experto.
Las relaciones se han profundizado y ampliado. Se va afianzando en Espaa la comprensin sobre la realidad de la China actual, y eso es muy importante frente a la aparicin del nuevo mandato de Trump, en el que Pedro Snchez puede ser un adalid contra el dominio imperial de EEUU y la UE puede despertar para funcionar con una mayor autonoma, opina por su parte Marcelo Muoz, fundador de Ctedra China, una organizacin que se dedica a promover en Espaa las relaciones con el pas asitico.
El ao pasado hubo un inusual trasiego de mandamases chinos que visitaron Espaa. En febrero, el jefe de la diplomacia china, Wang Yi, se reuni con el Rey Felipe VI. En mayo, otro alto cargo del poderoso Politbur de Pekn, Yin Li, visit la sede del PSOE, donde fue recibido por la vicepresidenta primera, Mara Jess Montero, y por el secretario de Organizacin, Santos Cerdn.
En noviembre fue el presidente chino Xi Jinping quien realiz una escala de 24 horas en Canarias antes de dirigirse a una cumbre en Per. El siguiente, Zhao Leji, presidente de la Asamblea Popular Nacional (APN), el mximo rgano legislativo, aterriz en Barcelona escoltado por el president de la Generalitat, Salvador Illa, y el ministro de Industria, Jordi Hereu. Zhao culmin en Madrid con Pedro Snchez y Felipe VI, quien viajar probablemente a Pekn junto a la Reina Letizia el prximo otoo. La ltima visita destacada la protagoniz Huai Jinpeng, ministro chino de Educacin, que se dej ver en Madrid junto a las ministras Pilar Alegra y Diana Morant para firmar un acuerdo de cooperacin educativa.