Snchez normaliza otro ao sin poder aprobar Presupuestos mientras echa un capote a Daz por la presin del gasto militar

La poltica es, muchas veces, una cuestin de nmeros, de dinero. Le sucede al Gobierno, dentro y fuera de Espaa. Fuera, porque la Unin Europea y la OTAN presionan a nuestro pas para invertir ya ms dinero en Defensa. Dentro, porque la falta de argamasa en el bloque de investidura, las posiciones enfrentadas de sus socios y sus exigencias hacen inviables, salvo sorpresa, unos Presupuestos para 2025. Pedro Snchez insiste en “sudar la camiseta” para intentar sacarlos, pero ya normaliza y naturaliza otro ao sin aprobar Cuentas Pblicas.

“Si no se aprueban, se prorrogan. Sin ninguna duda, porque ahora mismo lo que necesita Espaa es estabilidad”, ha respondido el jefe del Ejecutivo, preguntado por el paso del tiempo y la promesa incumplida de presentarlos en el primer trimestre del ao. El Ejecutivo ha ido modulando su posicin. Primero diciendo que cumpliran “en tiempo y forma”; despus que los presentaran en el primer trimestre de 2025; y ahora se hace pedagoga con que no pasa por prorrogar las cuentas actuales, porque ya se asume no presentarlos ni siquiera. Cuando hace semanas se deca lo contrario.

Los ltimos presupuestos aprobados por el Gobierno son los de 2023. En 2024, Snchez renunci a aprobarlos, debido al adelanto electoral en Catalua. En los siete aos de mandato de Snchez, ha logrado sacar tres Presupuestos. Ahora, el panorama pinta con nubarrones debido a la fragilidad parlamentaria de la coalicin, las exigencias de sus socios, y las posiciones distantes en materia econmica de partidos como Junts y PNV por un lado, y ERC, Bildu, Podemos, BNG o Sumar por otro.

De puertas hacia afuera, el mensaje oficial es que no se da nada por perdido. “Estamos hablando con los grupos. Estamos trabajando con ellos. No renunciamos a presentarlos y lo que hacemos es trabajar para ver qu posibilidades tenemos”, ha expuesto Snchez. Sin embargo, desde los grupos del Congreso como Junts o Podemos se explica que no ha habido conversaciones sobre este asunto.

Pero de puertas hacia dentro se asume que se acerca la fecha en que haya que renunciar ya de cualquier intento. Se dan de margen unas semanas ms, pero en cuanto asome mayo se reconoce que ya no tendra sentido hacer la intentona, porque en verano habra que ponerse ya con los de 2026. “Segn avanzan las semanas…”, dicen en el Gobierno.

La creencia en La Moncloa es que la buena marcha de la economa -los datos macroeconmicos- “facilita la gobernabilidad” y, en su opinin, hacen factible otro ao sin Presupuestos. “Con el Presupuesto que tenemos estamos liderando el crecimiento de las principales economas avanzadas, creando empleos, dando respuestas a muchas polticas sociales. Pero no nos rendimos y por supuesto que queremos aprobarlos”.

Una mano a Daz

La Moncloa no slo echa cuentas de cara a los Presupuestos, si cuenta con los nmeros para sacarlos. Tambin los hace con la exigencia de acelerar y aumentar el gasto en Defensa. Snchez defiende una posicin minoritaria en Bruselas, criticando el lenguaje blico que han adoptado los instituciones comunitarias.

Y en Espaa, sufre el rechazo de sus socios al aumento del gasto en Defensa. Incluso de su compaero en el Consejo de Ministros, porque las formaciones que integran Sumar –IU, Comproms, la Chunta– son muy beligerantes en su rechazo. De hecho, este jueves, mientras Snchez se reuna con los lderes europeos para hablar del plan para rearmar Europa, en el Congreso Sumar votaba contra el plan de rearme y peda salir de la OTAN.

IU, sobre todo, Comproms y la Chunta presionan a Yolanda Daz para que sea ms dura e intransigente con Snchez. Pero la vicepresidenta segunda mantiene una posicin ms ambigua y comprensiva que los socios que integran su coalicin. As se demostr tras la reunin que mantuvieron Snchez y Daz para tratar el gasto en Defensa y el posterior comunicado de Sumar, muy mesurado y medido.

El presidente del Gobierno ha querido echar un capote a su socia, acorralada por las exigencias de los partidos que componen Sumar, y protagonizando un momento poltico dbil. Snchez protege a Daz escudndose en una “discrepancia histrica” entre el PSOE y los partidos a su izquierda en materia militar y sobre la OTAN.

“Pero hay dos cosas que quiero agradecer a Sumar”, ha terciado el presidente del Gobierno. “Se respetan los compromisos europeos que tiene Espaa de contribuir a la unidad de nuestro proyecto comn. Y, en segundo lugar, que vamos a contar con una agenda social”.