Snchez arrincona el Congreso y aplaza tres meses su plan de Defensa
En un contexto pleno de incertidumbres e incgnitas, hay una certeza clara: Espaa tiene que llegar al 2% del PIB en gasto en Defensa. Y Pedro Snchez se ha comprometido a llegar a ese umbral antes de 2029, la fecha pactada. A partir de ah, todo son preguntas. Cunto dinero supone? Cmo se llegar? Habr que pasar por el Congreso? El presidente del Gobierno, eso s, va dejando alguna miga en el camino, a modo de pista. La predisposicin es tratar de arrinconar al Congreso en esta hoja de ruta de ms gasto militar, entre otras cuestiones por el rotundo rechazo que sus socios de gobernabilidad plantean a esta cuestin. En todo caso, es una cuestin que Snchez apuesta por dilatar en el tiempo, aplazar meses, al menos hasta junio, cuando se celebra la cumbre de la OTAN. De ah que en su ronda de ayer con los grupos del Congreso se limitara a informar, trasladar ideas y lneas generales, pero ninguna concrecin. Ni un atisbo de buscar un pacto o consensos. Porque saben en La Moncloa que si su estrategia de regatear el Congreso falla, es posible que tengan que buscar al PP.
Ni siquiera dentro de dos semanas, cuando Snchez comparezca en el Congreso, ofrecer ms detalles. No ir mas lejos de las generalidades y exposicin del contexto internacional y la visin que traslad a los partidos. Todo se lleva, como pronto, a junio. Vamos a tener una cumbre de la OTAN en La Haya. Ah es donde se va a sustanciar el grado de cumplimiento de ese 2%, dijo ayer en La Moncloa tras reunirse con los grupos, excepto con Vox.
La estrategia de Snchez pasa por dar la batalla todos estos meses para que la OTAN termine computando como gasto en Defensa partidas que ahora no lo hacen -ciberseguridad, inteligencia artificial, control de fronteras…- y de esa manera aumentar de manera importante lo que gasta en esta partida, de manera que el camino que tenga que recorrer Espaa sea el menos posible. Esto es, que lo que tenga que invertir para llegar a ese 2% sea menos y as pueda hacerse a travs de acuerdos y crditos en el Consejo de Ministros, que no precisan de control parlamentario.
Ocurre que La Moncloa tambin est esperando a ver cul es la decisin que se toma en https://www.elmundo.es/e/vo/vox.htmlrespecto a los mecanismos de ayuda -Espaa apuesta por un mecanismo mancomunado, por subsidios- y cmo queda configurada la definicin de gasto en seguridad para determinar cunto ha gastado y cunto tiene que invertir. Porque, claro est, no es lo mismo un dficit de gasto de 10.000 millones que de 4.000, por ejemplo.
Snchez, en todo caso, est dispuesto, en la medida que pueda, a transitar el camino para cumplir con la OTAN sin pasar por el Congreso. Esto es, a travs de la reordenacin de partidas, sacar a la superficie partidas que hasta ahora ayudaban a la Defensa pero no se computaban y caminar sobre la base de crditos y transferencias del Fondo de Contigencia mediante acuerdos en el Consejo de Ministros que no precisan del visto bueno del Congreso. Hay cuestiones que tienen que ver con la accin legislativa y otras con el grado de ejecucin del poder ejecutivo. Y esto es en lo que trabaja el Gobierno; Todas aquellas cosas que tengan que pasar por el Parlamento pasarn, como no puede ser de otra manera. Y otras cuestiones de la gestin del Gobierno tendrn que ser aceleradas y gestionadas por el Gobierno, repiti. El portavoz del BNG, Nstor Rego, expuso que le pregunt directamente a Snchez si algo de este aumento del gasto en Defensa iba a pasar por el Congreso, y que ste respondi: Probablemente no.
Cuando Alberto Nez Feijo le advirti de que no iba a aceptar ningn aumento de gasto que no pasase por el Congreso, el presidente respondi con un silencio muy elocuente. Pocos segundos despus, ech balones fuera y pas pgina. Con Gabriel Rufin ocurri lo mismo, pero de manera ms directa. Esto tiene que pasar por el Congreso, presidente, le dijo el portavoz de ERC, a lo que Snchez contest cambiando de tema.
Para el presidente del PP, esquivar al poder legislativo es un camino que conduce a la autocracia. Esto es el precepto bsico de la democracia, el manual de cualquier demcrata: slo este Congreso puede controlar y aprobar los ingresos y los gastos. Estamos yendo en una direccin muy peligrosa: que el nico poder que existe en Espaa sea el poder Ejecutivo, agreg. Fuentes del PP aaden que se tratara de un asalto al Congreso al que dan la mxima gravedad. Eso, polticamente. Jurdicamente, ya veramos, dicen, si lo recurriran a los tribunales, pero otras fuentes lo dan por descontado. Espero que el poder judicial aguante y resista, aadi Feijo.
Entonces, se descarta por completo la posibilidad de un acuerdo entre los dos grandes partidos? A corto plazo, s: As es muy difcil, yo dira que imposible, dijo Feijo. Pero en el futuro no. El lder de la oposicin asegur que en las cuestiones de Estado, siempre estar el PP, con la condicin de que el fondo y la forma sean serios y limpios. Despus, fuentes populares aclararon que el gasto debe pasar por el Congreso, porque consolida en los Presupuestos. Pero el principal partido de las Cortes s apoyara que el aumento de gasto se produjese de manera puntual por la va de los reales decretos ley, siempre que se pactase previamente y sin trucos ni engaos Serio y limpio, insistieron.
Los grupos minoritarios del Congreso, aliados en el llamado bloque de investidura, oscilaron entre el no rotundo al incremento del gasto militar, la decepcin por la inconcrecin de la informacin recibida y la indecisin a la hora de adoptar postura. La mayora de ellos s coincidieron en reclamar que los aumentos presupuestarios en Defensa sean sometidos a votacin en la Cmara y tambin, en la impresin de que Snchez ya ha tomado la decisin de eludir el trmite del Congreso.
Entre los primeros, ERC, Podemos y BNG. El portavoz de los republicanos, Gabriel Rufin, asegur que su grupo votar en contra de cualquier subida del gasto militar y slo dej abierta la posibilidad a reconsiderar esta posicin si el presidente lleva al Congreso su decisin y la explica muy bien y muy despacito. Para los morados, como recalc su secretaria general, Ione Belarra, no hay espacio para la ambigedad: su negativa a aceptar cualquier incremento del Presupuesto en este sentido es definitiva. Podemos tacha de error catastrfico incidir en lo que consideran una escalada blica.
PNV y EH Bildu se muestran ms cautelosos. Ambos son desde hace meses los aliados ms fieles a Snchez y de nuevo lo demuestran dando margen al presidente para que en un futuro explique con ms detalle sus planes. Las dos formaciones vascas aseguran reservarse su posicin a la espera de contar con ms datos. Ayer, el presidente reconoci el apoyo que le prestan los abertzales abriendo por primera vez las puertas de La Moncloa a su portavoz, Mertxe Aizpurua. En Bildu despliegan un discurso vago que apuesta por la diplomacia y la negociacin como frmula para llegar a la paz. El PNV, por boca de Aitor Esteban, insiste en que Europa debe reposicionarse y reforzarse ante el nuevo orden mundial y cit los mbitos de seguridad, industria y comercio. En Coalicin Canaria se mostraron dispuesto a apoyar al Gobierno tras garantizar Snchez que no habr merma en el gasto social. Una promesa que ya hizo en la reunin del martes a Yolanda Daz.
Para tratar de aplacar el malestar de sus socios, Snchez apuesta por tratar de vender el aumento de gasto en Defensa como una oportunidad de crear riqueza y empleo en Espaa. Como una oportunidad. Puede ser una oportunidad para Espaa, porque el compromiso que vamos a desplegar en el mbito presupuestario va a ser un compromiso por la tecnologa y la industria de nuestro pas. Las start ups, los emprendedores tecnolgicos, las pymes acompaadas de las grandes corporaciones, pueden dar un paso al frente. Para Snchez, esta inversin en Defensa puede facilitar que Espaa d un salto tecnolgico.