Pablo e Irene, esa pareja feliz
Mientras Pablo Iglesias presentaba ayer en la Taberna Garibaldi su libro, Enemigos ntimos, aqu su pareja, Irene Montero haca campaa en Murcia en su condicin recin estrenada de cabeza de lista a las generales.
Es este un hecho significativo, porque esta criatura es parlamentaria europea por su partido y podra parecer que hay una cierta contradiccin entre su cargo institucional y su campaa como candidata. Ciertamente la hay: las elecciones son para el ao 2027, fin de la legislatura y previsin del okupa de la Moncloa. Un servidor tiene confianza en que sean antes o no nos van a quedar de Espaa ni los rabos, pero esto no es relevante. Lo que s es significativo es que esta pobre mujer se haya puesto ya en campaa, porque eso revela la intencin de la podemia de que sean, quiz, este ao. Irene es candidata porque as lo quiso su Pablo. Ella es mujer de no muchas luces pero muy suelta de labia. Durante la etapa en la que fue portavoz parlamentaria (2017-2020) yo me aficion a sus discursos que tenan una inefable condicin de banda de moebius; al seguir el hilo de su pltica su facundia te llevaba inevitablemente al mismo sitio: la repeticin de los conceptos. Ella, ya digo, es muy suelta y desde su cualidad de candidata a diputada se expresa como si tuviera garantizada la Presidencia del Gobierno y dispone lo que tienen que hacer partidos como el PSOE o esa amalgama interminable de grupos y grupsculos que pastorea Yolanda Daz.
El principal mvil de Irene y sus secuaces es el odio a Yolanda, las ganas de ajustarle cuentas a la fundadora de Sumar. Amor con amor se paga e Irene,-es decir, Pablo-, no tiene para olvidar que Sumar fue el instrumento de Snchez para deshacerse de Podemos. Es comprensible, no se puede menospreciar el rencor como el impulso que anima a la gente y muy principalmente a Iglesias, que lo reivindicaba cuando convena. Pablo blasonaba de la militancia en un grupo terrorista de su padre y despeda sus tuits recomendando piolets, el arma con la que Ramn Mercader asesin a Trotsky, siguiendo rdenes de Stalin.
Es el caso que despus de haber sido herramienta del sanchismo contra Podemos, una Yolanda en horas bajas ha hecho llamamientos a la unidad a Ione e Irene, las gemelas de El resplandor. A buenas horas. El hombre que manda sin cargo orgnico en el partido sentenci: “Creo que Sumar polticamente est muerto. Creo que una parte se integrar en el PSOE, con el que no tiene tantas diferencias ideolgicas”. Los dems, IU y compaa para l. Aqu su pareja tom nota e impuso tarea a los dems desde una responsabilidad no contrastada: ellas tienen la responsabilidad de poner en pie a la izquierda; el PSOE tiene que hacer la unidad con los sectores del PSOE que ahora estn fuera del PSOE. O sea Sumar. Y claro, como estn ms cerca del PSOE, ella tambin ha puesto tarea a los sanchistas, acogerles en su seno. Continuar.