Marta Molina (ERC), la única imputada por Tsunami que declara ante el juez Castellón: “El movimiento independentista no es terrorismo”


Marta Molina (ERC), la única imputada por Tsunami Democràtic que ha acudido a declarar -por videoconferencia- ante el juez García Castellón solo ha respondido a las preguntas de su abogada en una declaración que ha despachado en apenas cuatro minutos. Un interrogatorio en el que ha asegurado que conocía los comunicados de Tsunami “por los medios de comunicación” y que es una activista independentista que siempre ha actuado de forma “pacífica”.

“El movimiento independentista no es terrorismo”, ha alegado ante el juez, que la ha dejado en libertad después de que las acusaciones particulares no hayan pedido ninguna medida cautelar para Molina. La dirigente, la actual responsable de movimientos sociales y miembro de la Ejecutiva de Esquerra, está imputada por terrorismo en esta causa junto a una decena de dirigentes más, entre ellos Carles Puigdemont y Marta Rovira.

Según fuentes jurídicas, su abogada, Marina Roig, le ha formulado tres preguntas: si hizo algún llamamiento a la violencia; si tuvo acceso a los comunicados de la plataforma y si se incitaba a la violencia.

En su declaración como investigada, Molina ha asegurado que todos los mensajes que envió la plataforma independentista fueron “llamadas a la no violencia y a la desobediencia civil”. Según su letrada, la dirigente de ERC ha insistido en que lo único que se alentó fue a una “movilización pacífica de la ciudadanía”.

Un centenar de personas, entre ellas el presidente catalán en funciones, Pere Aragonès, y representantes de todos los partidos y entidades independentistas, han arropado este miércoles a Molina antes de su declaración por la causa de Tsunami Democràtic.

Molina, que ha quedado en libertad tras una breve comparecencia ante el juez, ha sido la única de la decena de investigados por el juez de la Audiencia Nacional.

Según un informe de la Guardia Civil, Molina -con el apodo de “Mandela”- estuvo a cargo de un grupo de personas sobre las que ejerció una labor directiva y organizativa sobre el terreno y que habrían participado en varias acciones, como el intento de bloqueo del aeropuerto de Madrid. En un chat escribió: “Dejarlo todo a punto para salir por la mañana; no llevéis distintivos, ni banderas, ni camisetas, ni las letras CAT en el vehículo”, entre otras consignas.

En un inicio, el juez llamó a declarar a sede judicial a la secretaria general de su partido, Marta Rovira, o al jefe de gabinete del ex presidente de la Generalitat Carles Puigdemont, Josep Lluís Alay.

A pesar de que el magistrado suspendiese la declaración de ambos y la del empresario Oriol Soler, mantuvo en pie la citación del exsecretario de organización de ERC Xavier Vendrell; el periodista Jesús Rodríguez Sellés; el empresario Josep Campmajó; el considerado tesorero de ‘Tsunami’ Jaume Cabani y el dirigente de Òmnium Cultural Oleguer Serra.

El magistrado podría ahora emitir una orden de busca y captura por iniciativa propia, o bien podrían ser las acusaciones particulares las que se lo solicitasen.

Críticas del independentismo

La dirigente de ERC ha acudido a la Ciudad de la Justicia a las 09.30 horas y ha entrado a los juzgados entre aplausos y proclamas de apoyo de representantes de ERC, Junts, la CUP, los comunes, Òmnium Cultural o la Assemblea Nacional Catalana (ANC).

En declaraciones a los periodistas, el presidente de ERC, Oriol Junqueras, ha denunciado que los investigados por Tsunami Democràtic sufren “una represión profundamente antidemocrática” que, además, va “de manera explícita contra la voluntad del poder legislativo”, ya que el 30 de mayo el Congreso debe aprobar de forma definitiva la amnistía.

Por parte de Junts, su presidenta, Laura Borràs, ha dicho que el caso Tsunami es “especialmente paradigmático”, porque con él el juez pretende “considerar como terrorista al conjunto del independentismo”, pese a que él mismo sabe que esto “es una absoluta barbaridad”.





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