Junqueras revisar los acuerdos de ERC con el PSOE cada seis meses: “Es normal que Snchez est inquieto”


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Ya no habr nuevos acuerdos con quien no cumple los acuerdos establecidos. Eso quizs ha pasado en algn momento. Quizs ha pasado ms de lo que haca falta. Pero eso ya no volver a pasar, porque sta es una nueva ERC. Oriol Junqueras se dirigi en estos trminos a Pedro Snchez minutos despus de haber sido reelegido presidente de su partido, para aclarar al jefe del Ejecutivo y secretario general de los socialistas que la ERC mansa que el Gobierno tena como socio estable ha desaparecido para dejar paso a una formacin ms exigente, que necesita rentabilizar polticamente cada nuevo pacto y que, por encima de todo, necesita dejar de ser vista por el independentismo como un apndice de Snchez, mientras Junts contina reivindicndose como la nica fuerza secesionista catalana capaz de arrodillar al presidente y condicionar la gobernabilidad de Espaa.

En coherencia con lo subrayado en la noche del sbado, Junqueras requiere a Snchez que cumpla con los pactos sellados a cambio de su investidura y de la del presidente de la Generalitat, Salvador Illa. Pendiente de cobro por el primero de estos contratos est la condonacin de 15.000 millones prestados a Catalua a travs del Fondo de Liquidez Autonmica (FLA). Y tambin pide Junqueras al Gobierno acreditar que el desarrollo de la financiacin singular acordada a cambio de ungir al lder del PSC como president avanza al ritmo fijado.

Existen muchos motivos para votar no al acuerdo, sancion Junqueras antes de la consulta interna que acab validando por un estrecho margen el acuerdo con el PSC para la investidura de Illa, lo que invita a pensar que se opuso con su voto a la alianza alcanzada por la entonces secretaria general de ERC, Marta Rovira.

Partiendo de la desconfianza como premisa, Junqueras quiere poder demostrar ante la militancia y la ciudadana que el pacto de financiacin reportar a Catalua un estatus similar al que disfruta el Pas Vasco con el concierto econmico, al contrario de lo que defiende diariamente Junts para ridiculizar a ERC. Slo si obtiene una evidencia convincente apoyar los Presupuestos.

Pero el Ejecutivo deber seguir avanzando hacia la soberana fiscal catalana si quiere prolongar el respaldo de ERC al resto de la legislatura. No en vano, la nueva direccin del partido que encabeza Junqueras pretende revisar semestralmente los pactos adquiridos con el PSOE y rendir cuentas ante su militancia de su estado de cumplimiento.

Una comisin constituida por los presidentes de los grupos parlamentarios de ERC en el Congreso y el Parlament y otros dirigentes republicanos fieles a Junqueras como los ex consejeros Ester Capella, Joan Ignasi Elena y Juli Fernndez presentar informes semestrales del nivel de cumplimiento de los pactos ante el Consejo Nacional del partido -el mximo rgano entre congresos- y, en base a su contenido, se decidirn eventuales ultimtums a Snchez como el recientemente lanzado por el lder de Junts Carles Puigdemont. Esto evitar la tentacin de la contraparte de dejar los pactos en meras declaraciones de intenciones, defiende la direccin de Junqueras. Habr un cambio en las relaciones con los socialistas. Es normal que Snchez est inquieto, sostienen fuentes de los republicanos.

Junqueras acta exigido por los malos resultados electorales de ERC, que se dej 200.000 votos en las autonmicas despus de una era de colaboracin continua con el PSOE, pero tambin por la presin ejercida por el resto de candidaturas durante el medio ao de agria campaa que ha separado su dimisin y su reeleccin. La candidatura auspiciada por el ex consejero Alfred Bosch, que fue eliminada en la primera vuelta de las primarias, se postul abiertamente en contra del pacto de investidura de Illa y propuso celebrar una nueva consulta en verano -al ao de su aplicacin- para decidir si mantener o retirar el apoyo a los socialistas.

Junqueras, a quien siempre se le ha atribuido una querencia por el entendimiento con el PSOE y el PSC, reaccion propugnando esa revisin semestral de los acuerdos, que mantenga en constante tensin a los socialistas e iguale la presin pblica ejercida por la Junts de Puigdemont.

Snchez tendr que negociar con Junqueras el cumplimiento de un pacto en el que l no confa, porque no lo negoci, aaden voces de ERC para augurar que la empresa del presidente del Gobierno no ser sencilla. O que al menos no lo ser tanto como lo ha sido hasta el momento con una ERC incapaz de rentabilizar electoralmente acuerdos de calado como los indultos y castigada por la incorrecin de otros, como el traspaso de la red de Rodalies o la propia financiacin catalana, a la que Snchez an busca encaje legal y poltico tras haber prometido a ERC la llave de la caja.





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