En cal viva, una fosa recndita y 48 horas para sacarlos: as hall la Guardia Civil a los africanos desaparecidos en Murcia
Jean Mirabeau Ngoho y Siaka Coulibalyal, los dos africanos cuya pista se perdi en un nave industrial de Librilla (Murcia) en diciembre, estaban enterrados en un agujero destinado a tirar el aceite en desuso y quien los mat los roci con corrosivos. Dar con su paradero -todo apunta a que son ellos a falta de que la autopsia lo confirme- no ha sido fcil para la Guardia Civil, y mucho menos poder extraer los restos de ambos de la fosa de la empresa Porkytrans, tal como explican a este peridico fuentes de la investigacin policial.
Los agentes han tardado dos das en poder acceder a ellos dada la profundidad del hueco y el lugar tremendamente escondido en el que se ubicaba. Las mismas fuentes revelan que sobre los cadveres haba cal viva y sosa custica, con lo que los forenses debern identificarlos por el ADN. Estn muy deteriorados, indican. Jean Mirabeau Ngoho y Siaka Coulibalyal desaparecieron el pasado 14 de diciembre tras una reunin en las instalaciones de la empresa murciana, en concurso de acreedores desde hace siete aos.
Los dos hombres tenan antecedentes por estafa por el conocido timo de los billetes tintados -consiste en engaar a la vctima para hacerle creer que mediante el lavado de unas cartulinas blancas del tamao de los billetes, y utilizando unos productos qumicos y unos procesos casi mgicos, se pueden obtener billetes legtimos-. Ese da haban quedado con responsables de la compaa. Tras meses de investigacin, la Guardia Civil detuvo hace unos das al encargado de la empresa y a otro hombre. Todava no haban aparecido los cadveres pero el juez les envi a prisin ante la cantidad de indicios acumulados en su contra. Ninguno de ellos declar en la Comandancia de la Guardia Civil de Murcia ni en el juzgado.
Las pesquisas partieron de la denuncia de la pareja de uno de los hombres. Aseguraba que no saba nada de l desde el da en el que haba estado en Librilla. Arrancaron las diligencias bajo la batuta de la Polica Judicial de la Comandancia.
Desde el primer momento, los agentes sospecharon de que ambos hombres podran estar muertos y sobre esa hiptesis construyeron su trabajo. Cuando las sospechas casi rozaron las certezas se movilizaron unidades de Madrid que se desplazaron hasta Librilla. Llegaron los buzos del Grupo de Actividades Subacuticas (GEAS), quienes revisaban las balsas y tambin los agentes adscritos a la Unidad de Subsuelo, que haca lo propio con los pozos y fosas spticas. Tambin fue necesario el uso de un georradar as como perros especializados en la bsqueda de restos biolgicos.
A ltima hora del pasado jueves, los investigadores dieron con la fosa. Estaba en un lugar oculto. En una primera inspeccin, comprendieron que iba a ser imposible extraer los restos. De hecho, se necesitaron dos das para hacerlo. Fue ayer cuando lograron dar con el ltimo, e imprescindible eslabn, que permita cerrar la investigacin del Instituto Armado. El motivo por el que los encarcelados pudieron acabar con la vida de los hombres con los que haban quedado se desconoce aunque las primeras hiptesis apuntan a que quiz se sintieron amenazados.
Tampoco se descarta que se produjera una pelea entre las cuatro personas que se citaron en la nave de Librilla, ubicada en un gran polgono industrial.