El viceconsejero de Torres defiende sus mensajes con Koldo como un “trato entre administraciones” guiado “por el sentido común”
El ex director del Servicio Canario de Salud y actual jefe de gabinete del ministro de Política Territorial, Antonio Olivera, ha admitido que no investigó la empresa Soluciones de Gestión -patrocinada por Víctor de Aldama y que llegó a vender al Gobierno canario más de 12 millones de mascarillas– antes de adjudicarle el contrato, “guiado por el sentido común”: “Si estaba suministrando a los Puertos del Estado, ¿por qué no iba a ser válido que me suministre a mí?”. Dicha institución asumió la compra de ocho millones de mascarillasforzada por Ábalos a través de una orden ministerial.
En su comparecencia ante la comisión de investigación del Parlamento canario sobre las compras de material sanitario durante la pandemia, ha asegurado que “no se adelantó ni un euro” a Soluciones de Gestión. “Nadie fue cómplice en ninguna trama”, ha añadido el número dos de Ángel Víctor Torres. Tanto Torres como Olivera mantuvieron comunicaciones, reveladas por EL MUNDO, con el ex asesor de José Luis Ábalos, Koldo García, para acelerar dichos pagos y compartir expedientes internos del Ejecutivo regional con el asesor.
Sobre dicho intercambio de whatsapps, Olivera ha asegurado que se trataba de “un trato entre administraciones”: “Un empleado público me pregunta por el pago de esta empresa y yo se lo enseño, pum“. “El ministro Torres me pide que mire cómo está el procedimiento para que garantizara que se cumpliera ese contrato”. ¿Se preocupaba Torres de las gestiones de pago de más empresas?, le preguntan. “Me ha pedido hacer muchas gestiones con muchas cosas y el mismo presidente ha comentado que nos hemos reunido con muchas otras empresas”, ha recordado Olivera, que ha citado los problemas de cobro de la empresa Maresa, como ejemplo.
Además, el jefe de gabinete de Torres ha sostenido que no se dio un trato preferencial a Soluciones de Gestión y que, de hecho, se pusieron en contacto con “muchísimas empresas” que tenían “contactos comerciales con China”. Según ha explicado, la decisión final sobre la contratación recaía sobre la Dirección general de recursos económicos en caso de ser validado el material ofrecido.
“El Gobierno de España tenía la contratación centralizada a través de INGESA (Instituto Nacional de Gestión Sanitaria) y además compartíamos experiencia”, ha explicado Olivera. El ministro Torres, entonces al frente del Gobierno canario, se mantenía “reuniones interministeriales de Sanidad todas las semanas” en las que se compartían “posibles contactos”, pero “sin dar órdenes”, según ha recordado Olivera.
Por su parte, el Ejecutivo Canario tuvo “contacto directo a través de un responsable de la empresa” Soluciones de Gestión, que “tenía capacidad para hacer entregas adicionales” y “fue tratado como a cualquier otro proveedor durante aquella etapa”.
“Nunca tuve la sensación de que nadie quisiera aprovecharse de una situación tan compleja”, ha reflexionado la mano derecha de Torres sobre la intervención de comisionistas -“desalmados”- en estas operaciones. No obstante, cabe recordar que en su declaración ante la Audiencia Nacional, Aldama alegó que el ahora ministro de Política Territorial le llegó a exigir una comisión de 50.000 euros que finalmente se negó a abonar.
El ex director del Servicio Canario de Salud ha cargado contra esta comisión de investigación, asegurando que se pretende hacer un “revisionismo” de “aquella época” motivado por un “revanchismo político”. “Cualquiera en mi situación hubiera hecho lo mismo con los ojos cerrados”, ha aseverado. Antonio Olivera ha defendido su actuación en plena pandemia recordando la “excepcionalidad de los mecanismos de contratación” debido a las “dificultades” que encararon los proveedores.
Tanto Olivera como el empresario Víctor de Aldama estaban citados a comparecer esta mañana en el Parlamento Canario en la comisión de investigación.