El mundo se derrumba y el Congreso se entretiene…
El mundo se derrumba y nosotros nos enamoramos, le dice Ingrid Bergman a Humphrey Bogart en una de las escenas ms clebres del cine de todos los tiempos, mientras en las calles de la Pars ocupada, la Gestapo da instrucciones a sus habitantes.
El mundo se derrumba y el Congreso, a lo suyo. Los partidos y los diputados entretienen el tiempo con debates parlamentarios en los que se sube a la tribuna para tratar sobre el futuro de Espaa y la humanidad, y se acaba hablando del Pacto del Ventorro o de la supervivencia de la banda terrorista ETA. El mundo se derrumba, la Unin Europea pide a sus ciudadanos que hagan acopio de agua, alimentos no perecederos, cerillas, pastillas de yodo y medicamentos y en el Congreso nadie se refiere a ese kit de guerra que las autoridades de Bruselas nos recomiendan por si viene la guerra.
El mundo se derrumba, los ciudadanos acuden a sus instituciones en busca de respuestas, de preguntas, de tranquilidad, o de lo que sea, y lo que escuchan es el ruido de fondo de la discordia entre Gobierno y oposicin. El mundo se derrumba y aparecen de nuevo en el exterior del Congreso los hombres y mujeres del mundo de la cultura para firmar una tierna y emocionante reedicin del No a al guerra, tal cual si estuviramos en el ao 2003 y el presidente fuera Jos Mara Aznar y no Pedro Snchez. El mundo se derrumba y nosotros?, nosotros, a lo nuestro.
Lo nuestro era una comparecencia parlamentaria del presidente del Gobierno para informar a la Cmara de los planes de la Unin Europea para aumentar los gastos en Defensa tras el portazo de Donald Trump. Como consecuencia de esos planes, Pedro Snchez est obligado a hacer su propio plan para gastar ms dinero en la Defensa nacional. Aunque es un plan que el presidente an no tiene, o, si lo tiene, no lo ha comunicado a la Cmara.
El mundo se derrumba y en las ltimas semanas, ha dado la sensacin de que el Gobierno tambin amenazaba derrumbe. Los socios de Gobierno le dan un dolor de cabeza a Snchez casi todas las maanas, y Puigdemont en Waterloo le fastidia todo lo que puede, y ms. La foto con Otegi ha sido el ltimo regalito. El proyecto de Ley de Presupuestos de este ao es una quimera y, aunque Moncloa insiste en que no pasa nada por no tener Presupuestos, s que pasa. El Congreso de los Diputados es un territorio hostil para Pedro Snchez y, aunque no pase nada, algo s que pasa.
Pasa que nadie sabe lo que puede pasar. Ni Pedro Snchez, ni por supuesto Alberto Nez Feijo. Al presidente del Gobierno y al lder de la oposicin se les ve cmodos en la discordia. Con un papel perfectamente diseado por ellos y sus colaboradores. Snchez ha ido ganando en experiencia parlamentaria y se le da de miedo la irona y el choteo sobre el liderazgo de Feijo. Lo que quiere usted es extender a Espaa el pacto del Ventorro. El lder socialista sigue agarrado a los pactos del PP con Vox para presentarse ante los espaoles como el valladar contra los ultras.
Feijo tambin disfruta lo suyo con el recordatorio -nada agradable para el Gobierno- de que la mayora de la investidura se le ha esfumado y que si no hay Presupuestos, tiene que haber elecciones. La misma tesis que sostuvo el Pedro Snchez de la oposicin cuando gobernaba Rajoy. Ahora, sin embargo, la economa va tan bien que sin Presupuestos, s hay Gobierno hasta 2027.
El mundo se derrumba y los periodistas se mueren por hacer una crnica sobre un pacto de Estado, que diga que Feijo est dispuesto a pactar con Snchez un incremento del gasto militar, tal y como han votado conjuntamente PSOE y PP en la UE. Abandonad toda esperanza, repite una y otra vez el lder del PP. Sin un plan que l pueda analizar y tocar con las manos, no es no.
Hay que decir que tanto Snchez como Feijo tienen el asunto perfectamente diseado. El presidente no tiene intencin de someter a la Cmara las partidas del incremento de los gastos de Defensa. Por consiguiente, el lder de la oposicin no tendr que pronunciarse ni que votar. Todos contentos y cada uno en su esquina.
El mundo se derrumba y la izquierda a la izquierda del PSOE sigue viviendo en la Guerra de Irak. Snchez dedic buena parte de su discurso a hacer pedagoga a su izquierda. Ni Sumar, ni Podemos acaban de ver muy claro que Putin sea tan peligroso como lo pintan los pases de la UE que tienen frontera con Rusia. El mundo es como es y no como nos gustara que fuera, dijo Gabriel Rufin en una intervencin de sentido comn.
El mundo se derrumba y Aitor Esteban se despide del Congreso pidiendo a los jvenes que no den la espalda a la poltica.