El fiscal general arremete contra su subordinada en Madrid que le seal como filtrador
La versin ofrecida ayer por el fiscal general del Estado incluy el cuestionamiento de la declaracin que como testigo haba ofrecido das antes la fiscal Superior de Madrid, Almudena Lastra. En particular, del episodio entre ambos que apuntaba a lvaro Garca Ortiz como filtrador del correo en el que la pareja de Isabel Daz Ayuso reconoca dos delitos fiscales.
Segn cog el telfono, le dije ‘lvaro, has filtrado la nota?’. Me dijo ‘eso ahora no importa’. Garca Ortiz neg que esa conversacin, relatada as por Lastra, se hubiera producido. No crea, explic en su declaracin como imputado en el Tribunal Supremo, que nadie se dirigiera al fiscal general del Estado en esos trminos.
A preguntas de su defensa, que ejerce la Abogaca del Estado, el fiscal general resalt que resulta conocida la animadversin de la fiscal Superior a la actual cpula de la Fiscala.
A este supuesto motivo para que declarara lo que el investigado niega, Garca Ortiz aadi otro: que tambin la fiscal Superior de Madrid haba recibido la informacin que luego se filtr. Por tanto, ese encontraba en la misma situacin que el hoy imputado por la filtracin y, por tanto, era comprensible que quisiera desmarcarse. Junto a la sugerencia de que Lastra poda haber filtrado el documento, aadi que estaba convencido de que no haba sido as.
La fiscal jefe de Madrid, Almudena Lastra.
Esa pregunta-acusacin de la fiscal Superior es uno de los elementos que sealan a Garca Ortiz, como lo es el mensaje del fiscal general que su subordinada aport a la investigacin: Si dejamos pasar el momento nos van a ganar el relato. Desde la conversacin de abril, el fiscal general y la fiscal superior no han vuelto a tener contacto.
Mientras que como testigo Lastra compareci con la obligacin de responder a todas las partes y decir la verdad, Garca Ortiz pudo optar por contestar, diciendo la verdad o no, slo al abogado del Estado que lleva su defensa. En sus respuestas, se desvincul reiteradamente de las dos filtraciones investigadas por el Supremo: la del expediente tributario de Gonzlez Amador y la del correo con la oferta de pacto del novio de Isabel Daz Ayuso.
Sobre el primero de sus movimientos que se relacionan con la filtracin, explic que el 7 de marzo reclam desde la Fiscala General el expediente de Gonzlez Amador porque haba periodistas que ya se haban interesado. El encargado de la gestin fue su mano derecha, el teniente fiscal Diego Villafae, imputado y citado la prxima semana.
El expediente se filtr el da 12. Al da siguiente, EL MUNDO public la informacin de que la Fiscala haba ofrecido un pacto a la pareja de Daz Ayuso, respaldndola con el correo que as lo reflejaba. Este diario no public, por no estar confirmada, la tesis de que al fiscal del caso se le haba ordenado frenar ese acuerdo para perjudicar as a la dirigente popular. Sobre este aspecto -que s se public en otros medios- Garca Ortiz neg haber dado orden alguna, as como haber querido perjudicar especficamente a Gonzlez Amador.
En cuanto a la segunda filtracin, Garca Ortiz declar que conoci la noticia de EL MUNDO cuando estaba en su casa. Contact inmediatamente con la fiscal jefe provincial de Madrid, la imputada Pilar Rodrguez, para que le enviara la documentacin. En ella se inclua un correo previo de la defensa de Gonzlez Amador ofreciendo reconocer los delitos fiscales.
El fiscal general pidi a la fiscal jefe que le enviara la documentacin a su cuenta personal de Gmail. Segn dijo ayer, porque el correo oficial de la Fiscala iba con ms retardo y era ms incmodo que el particular para mirar desde el mvil.
En sus sucesivas negativas, Garca Ortiz rechaz igualmente haber filtrado el correo al Gobierno o su entorno. En sus resoluciones, el juez instructor ha dejado abierta la va de la participacin de La Moncloa en la filtracin, con el objetivo de perjudicar polticamente a Ayuso.
El juez enmarca los hechos en el artculo 417 del Cdigo Penal donde se persigue a la autoridad o funcionario pblico que revelare secretos o informaciones de los que tenga conocimiento por razn de su oficio o cargo y que no deban ser divulgados.
Los informes de la UCO revelaron que en el telfono del fiscal general no haba mensajes en las fechas de los hechos investigados y que el imputado haba cambiado de terminal el 23 de octubre, unos das despus de que el Supremo le abriera la investigacin y pocos das antes de que la Guardia Civil registrara su despacho. l ha venido alegando que elimin los mensajes por seguridad.
Este mircoles, Garca Ortiz declar que desde que es fiscal general ha cambiado hasta seis veces de terminal. La ltima de ellas, el pasado 23 de octubre. El telfono nuevo lo haba recibido en realidad cinco meses antes.
De forma simultnea a la declaracin, los servicios informticos de la Fiscala General informaron al juez de que Garca Ortiz no devolvi ningn telfono cuando en octubre cambi de terminal y borr todos los datos de mensajera instantnea. No consta en esta seccin recepcin de dispositivo mvil alguno, como tampoco que haya sido solicitada su devolucin por parte de la Administracin, indica la respuesta al juez Hurtado. El magistrado tambin quera saber si, en caso de conservarse el telfono antiguo, se haba formateado, es decir, si se haba borrado toda su informacin. Al no disponer del telfono, no hay respuesta en este punto.