El drama del garaje de La Torre (Valencia) donde murieron ocho vecinos: “El nivel del agua creci muy rpido. De repente, la puerta del garaje cedi y entr de golpe”
“Grito para que todo el mundo sepa que estoy vivo, que otros hoy no pueden decirlo”, se escucha en una calle de la pedana de La Torre, pegada a la ciudad de Valencia y azotada por la DANA. A escasos 100 metros de distancia, en la calle Mariano Brull, slo se escucha el ruido de las palas quitando el barro de las casas y el motor de la bomba de achique de los bomberos. Aqu al menos 8 personas murieron durante la tromba de agua atrapadas en un garaje.
La marca de barro que queda en las paredes de los edificios de dos plantas seala hoy la altura que alcanz la tragedia. Casi dos metros. Cuando el agua empez a crecer en La Torre, varios vecinos se apresuraron a sacar sus coches del garaje. Los pocos minutos que pasaron hasta llegar a sus vehculos fue suficiente para encontrarse en una ratonera.
“El agua pasaba por la calle muy fuerte y el nivel creci muy rpido; de repente la puerta del garaje cedi y entr de golpe a los dos stanos, absorbiendo los vehculos y haciendo imposible salir. Sabemos que estn ah desde ayer, pero hasta ahora no se ha podido acceder”, trata de explicar a EL MUNDO el padre de uno de los fallecidos, un polica local de la 7 Unidad de Distrito.
Entre las vctimas tambin se encuentran un matrimonio y su hija. Segn algunos vecinos, los bajos del edificio sufren filtraciones, lo que tambin llev a esta familia a bajar a salvar sus vehculos. Fue una decisin fatal.
No obstante, no todas las personas que perdieron la vida en esos stanos por querer escapar con sus coches. Segn algunos vecinos consultados por este peridico, una mujer pasaba justo por la puerta del garaje cuando sta se quebr, siendo arrastrada al interior por la fuerza del agua.
Al medioda de este jueves, los bomberos seguan trabajando para achicar el agua de los dos stanos que quedaron totalmente inundados. Mientras, los vecinos trabajan a destajo y en cadena para retirar fango y escombros. “No entiendo que no estn viniendo los que viven en Valencia a ayudar, se necesitan muchas manos”, se lamenta Javier, ajeno a la dificultad de llegar a la pedana; slo se puede a pie, siguiendo una hilera de gente que regresa a sus casas tras hacerse con agua y vveres. El nuevo cauce del ro Turia es la frontera que separa un mundo que sigue su marcha con un lugar arrasado repleto de escenas dantescas.