Disparos al aire para sofocar un intento de motn a bordo del patrullero Ro Mio tras rescatar a 170 migrantes de un cayuco frente a Mauritania

Actualizado

Segn fuentes del Instituto Armado, el pas africano se neg a que los rescatados desembarcaran en Nuadib y la Guardia Civil puso rumbo a las Islas Canarias

El buque Ro Mio de la Guardia Civil navega durante una misin.MINISTERIO DEL INTERIOR

La Guardia Civil, en concreto su patrullera Ro Mio, se ha visto envuelta en una situacin altamente compleja. Pese a estar participando en labores de rescate de inmigrantes en el norte de frica, ha tenido que realizar disparos al aire para frenar a los 170 hombres que fueron recogidos por los efectivos del Instituto Armado en aguas de Mauritania hace tres das.

Segn explican a este peridico fuentes del Instituto Armado, la veintena de agentes de la Guardia Civil a bordo de la Ro Mio rescataron en aguas de Mauritania a 170 hombres que viajaban en un cayuco y que corran el riesgo de ir a la deriva. Estas fuentes destacan el hecho de que todos los rescatados fueran hombres, “fuertes”, y que no hubiera ni mujeres ni nios en la embarcacin.

Tras el rescate, dificultoso ya que la embarcacin de la Guardia Civil no es de grandes dimensiones, se opt por desplazarse hasta el puerto mauritano de Nuadib, en la frontera con el Shara Occidental, para desembarcar y repatriar a los rescatados.

Una vez all, despus de una “navegacin complicada”, subi a bordo un gendarme de Mauritania para evaluar la situacin. Pese a la gestin de Frontex, el mando policial mauritano se neg a que los rescatados fueran entregados en su pas. Y no permiti que pusieran un pie en tierra, con lo que los 170 hombres permanecieron en la embarcacin mientras los responsables policiales y polticos discutan y tomaban la decisin. Pese a la fuerza que trat de imponer Frontex en las negociaciones, Mauritania no accedi al desembarco. Algunas fuentes apuntan que los responsables de Frontex “no fueron muy generosos o los mandos mauritanos exigieron mucho” a la hora de acordar el desembarco, en referencia a pagos extraoficiales.

As las cosas, la Guardia Civil se qued con el contingente de rescatados a bordo. Tras consultas con Madrid se decidi que la nave Ro Mio se desplazara a las Islas Canarias para llevar all a los 170 migrantes. Los agentes trataron de explicarles el cambio de rumbo y que las autoridades de Mauritania no haban dado el visto bueno a su desembarco. Los rescatados, entre las dificultades de comunicacin y el hambre, comenzaron a mostrar sntomas de inquietud.

El destino fijado por Madrid era Canarias y est previsto que la nave llegue el da 29. Pero, por el camino, los efectivos del Instituto Armado han tenido que frenar al menos en una ocasin un intento de motn por parte de los rescatados. Segn explican estas fuentes, la situacin era delicada ya que se trataba de 170 “hombres fuertes” frente a la dotacin de la patrullera, con una veintena de agentes.

As, al menos en una ocasin, los agentes espaoles tuvieron que realizar disparos al aire con sus armas reglamentarias para “frenar” el avance de los rescatados que protestaban por la situacin en la que estaban viajando. Los agentes haban tenido incluso que cocer arroz en una zona de mquinas para poder mantener a los rescatados.

Pero ese malestar fue subiendo de tono y los guardias se sintieron amenazados, por lo que utilizaron sus armas reglamentarias, con fuego real para disparar al aire y frenar el mpetu de las 170 personas a bordo.

Durante el trayecto, los rescatados viajan en la cubierta superior de la patrullera, mientras que los agentes han tenido que resguardarse por momentos en el interior de la embarcacin para evitar nuevos intentos de motn.

Source link