Desconcierto en el club de fútbol de Coslada tras la detención del entrenador del cadete B por agresiones sexuales a menores: “Ningún niño notó nada raro en su conducta”
En el Club Deportivo de Coslada (Madrid) todos apreciaban al entrenador del equipo cadete B masculino, conocido como Fran, de 39 años. Su carácter, amable y extrovertido, le había convertido en una persona querida, pese a que solo llevaba en la institución desde el pasado mes de septiembre, tras haber entrenado en otros conjuntos del corredor del Henares. Nadie se podía imaginar que en realidad era un fugitivo buscado por la Policía Nacional por abusos y agresiones sexuales a menores. Francisco Javier U. P. había nacido en Caracas y estaba nacionalizado español, ya que llevaban en nuestro país desde hace más de 10 años.
El pasado sábado por la tarde, antes de comenzar en el campo del Olivo de Coslada el partido de categoría preferente cadete entre el Coslada y el Rayo Ensanche, se presentó la Policía Nacional en los vestuarios preguntando por el entrenador. Los agentes de la sección de fugitivos de la UDYCO central detuvieron a Fran, al que esposaron y llevaron detenido delante de todos los padres y jugadores que estaban en el campo a la espera del inicio del partido correspondiente a la jornada 14.
Todos los asistentes se quedaron perplejos. Nadie sabía el motivo de su arresto, pero temían que podía ser algo de relevancia por la forma en la que se produjo la intervención policial. «Sabíamos que era algo gordo, muy gordo, pero nos podíamos imaginar que era por abusos y violaciones de menores», señaló un miembro de la junta directiva del Club Deportivo Coslada. Sus jugadores, de 14 y 15 años de edad, también se quedaron sin palabras en el momento del arresto. El club puso otro entrenador de la cantera para dirigir al equipo, que acabó ganando 4-0 el encuentro.
Al entrenador le constaba una reclamación de la Audiencia Provincial de Madrid por abusos y agresión sexual a menores. En un primer momento, se indicó que podría tratarse de hechos ocurridos cuando vivía en Venezuela, pero a tenor de los últimos datos, este entrenador habría sido denunciado al menos por un menor ajeno al club, con quien contactó por redes sociales, mintiendo sobre su edad, y de quien habría abusado.
Por su parte, el club aseguró ayer que desconocía por completo los antecedentes de esta persona. «Nadie esperaba esta detención en el club, nos hemos quedado en shock por la noticia». Añadieron que, con arreglo a la normativa vigente, el entrenador presentó antes de ser contratado el certificado del Ministerio de Justicia que acreditaba que no tenía antecedentes por delitos de naturaleza sexual en España.
El club emitió ayer un comunicado manifestando su «absoluto rechazo con conductas que atenten contra la integridad sexual (máxime contra menores de edad)». «Se trata de una investigación en curso, cuya iniciación se desconocía, al no haberse comunicado ni por el investigado, ni por la Policía», indicó la directiva que ha decidido apartar al entrenador. Y recalcan que «aunque los hechos investigados son ajenos al club (al no haberse producido en el seno del mismo), se ha iniciado una investigación interna para analizar lo sucedido, habiéndose puesto a disposición de la Policía y de la Justicia para colaborar en lo que resulte necesario».
Ninguno de los jugadores del equipo cadete había notado nada raro en la conducta de su entrenador. «Lo único anómalo fue que un día le dijo al padre de unos de los jugadores que tenía una cita judicial pendiente y que, como había cambiado de domicilio, le había llegado con retraso», señalaron fuentes de la directiva del Club Deportivo Coslada.