Bronca en el Congreso al grito de “traidores”, “vergüenza”, “filonazis”… Vox se enzarza con Sumar y el PSOE
Lluvia de insultos y descalificaciones en el Pleno del Congreso que este jueves debate la Ley de Amnistía. Vox, Sumar y posteriormente el PSOE se han enganchado en una bronca a gritos en el hemiciclo tras la intervención de Santiago Abascal, al que el miembro minoritario de la coalición gubernamental ha acusado de liderar un partido “islamófobo y antisemita” y haberse reunido esta semana con “el carnicero de Rafah“, en referencia a Benjamín Netanyahu, primer ministro israelí.
En el origen de la trifulca está unas palabras de Santiago Abascal contra el diputado de Sumar Gerardo Pisarello, que le precedió en el turno de palabra. Le ha reprochado ser una persona “que odia profundamente a España y que aquí viene a disimular y a participar en un intento de romper la convivencia en nuestra patria”, además de haber “arrancado” la bandera de España de la fachada del Ayuntamiento de Barcelona.
Pisarello ha pedido la palabra para responderle “por alusiones”. Primero le ha señalado que se siente “orgullosamente” catalán y latinoamericano y que, aunque fuera “de Senegal o de Donosti”, le dice lo siguiente: “No aceptamos ninguna lección alguna de los señoritos que siempre han vivido del cuento y que forman parte de organizaciones históricamente islamófobas y antisemitas y que han ido a rendirle pleitesía al carnicero de Rafah”.
Tras las acusaciones de Pisarello ha solicitado el turno de palabra José María Figaredo, diputado y secretario general del grupo parlamentario de Vox, por las alusiones personales a miembros de su partido. La presidenta de la Cámara Baja, Francina Armengol, no obstante, ha rechazado darle la palabra mientras el cruce de insultos entre bancadas ya había paralizado la sesión plenaria.
Un “espectáculo” de “mala educación”, ha definido la presidenta del Congreso, que ha dado paso a la intervención del siguiente grupo, que era el socialista. En ese momento, diversos diputados de la bancada de Vox han interrumpido con nuevos gritos al parlamentario socialista, Artemi Rallo. Manuel Mariscal, de Vox, ha tachado de “traidor” y “corrupto” al diputado del PSOE por defender la amnistía.
“Dale la palabra a Figaredo otra vez”, ha reclamado otro miembro de Vox en dirección a la presidencia de la Cámara. Pero Armengol ha decidido dar paso a Rallo, que además de defender la amnistía ha clamado contra los “filonazis” y “neofascistas” de Vox.
“Pido respeto a la cámara, a la democracia y a la gente que nos está escuchando”, ha incidido Armengol para tratar de reducir la tensión que se ha apoderado del hemiciclo. La escalada de decibelios se ha saldado con tres diputados de Vox llamados al orden por la presidencia del Congreso: José María Figaredo, Manuel Mariscal y José María Sánchez.