La Audiencia impone la pena ms alta, cuatro aos y medio de internamiento en rgimen cerrado, a un menor yihadista por preparar un atentado


Actualizado

El Juzgado Central de Menores de la Audiencia Nacional ha condenado a cuatro aos y medio de internamiento en rgimen cerrado al joven de 17 aos, y nacionalidad siria, que prepar explosivos en su casa de Montellano (Sevilla) para cometer un atentado yihadista.

En una sentencia, recogida por Europa Press, el juez impone -segn apuntan fuentes jurdicas- la pena ms alta hasta la fecha para un menor. En este caso, como autor de los delitos de integracin en organizacin terrorista por su pertenencia al Estado Islmico y por uno de tenencia de explosivos.

El magistrado Jos Luis de Castro, que tambin ha impuesto al joven cinco aos de libertad vigilada, ha ordenado al equipo tcnico del centro de menores que elabore un plan de desradicalizacin durante su estancia en el mismo.

Segn sostiene en el fallo, desde febrero de 2023 la Polica Nacional tuvo conocimiento de la progresiva radicalizacin del menor, que accedi a travs de Internet a contenidos “radicales de carcter yihadista con la finalidad de adquirir los conocimientos suficientes” sobre Daesh y sus ideales, as como la forma de llevar a cabo ataques terroristas con explosivos.

El magistrado sostiene que su evolucin fue tal que a principios de este ao el menor plane cometer un atentado mediante el explosivo TATP, conocido como La madre de Satn, y que tambin fue preparado por la clula yihadista que perpetr los ataques de Barcelona y Cambrils.

La sentencia indica que en sus perfiles de redes sociales se aprecia “una evolucin radical yihadista” a lo largo de 2023. En concreto, por la recepcin y difusin por parte del condenado de contenidos sobre Estado Islmico.

El juez, en concreto, asegura que el menor haba “asumido su papel de ciber soldado o yihadista virtual”, lo que llev a los agentes a realizar seguimientos que revelaron algunos de los preparativos que llev a cabo.

El condenado, junto a un amigo, sali al campo con una mochila y en la zona fueron encontradas manchas similares a las de un incendio. En enero de 2024, la Polica observ como tir a la basura dos bolsas con diferentes materiales y sustancias con las que podra estar elaborando explosivos.

A los pocos das, los investigadores observaron como el joven volvi al campo, donde escucharon diferentes detonaciones que confirmaron las sospechas de la Audiencia Nacional. Fue entonces cuando se solicit la entrada y registro en su vivienda.

All, la Polica encontr los tres elementos con los que se fabrica la conocida como La madre de Satn: acetona, agua oxigenada y cido sulfrico, adems de carbn y un bote de desatascador de desages.

Frente a los armarios en los que localizaron esos materiales, los agentes encontraron que en su escritorio haba situado una suerte de “secadero de explosivos”. Segn un Tedax, en el mismo haba bandejas de secado con papel de cocina y restos de explosivos.

Explosivos caseros

En esa misma mesa los agentes encontraron “parte de una bomba ya montada con metralla adosada a la misma, lista para su uso, y a la que nicamente” le faltaba el explosivo para su detonacin. En los cajones, adems, tambin haba ms azufre y carbn.

El magistrado relata que tambin pudieron localizar cuadernos en los que haba notas con la composicin qumica de los explosivos caseros. Adicionalmente, los agentes intervinieron un machete, un chaleco tctico militar con portacargadores, varios mosquetones, un botiqun y una bandera de Daesh enmarcada.

En su mvil, la Polica se encontraron archivos que, segn la sentencia, alentaba a la yihad con una participacin activa y personal del menor, entre ellos cnticos yihadistas o imgenes de armas y explosivos.

Tras analizar el telfono, tambin se descubrieron chats en la aplicacin de mensajera Telegram entre el menor y varios acusados. En una de esas conversaciones, el condenado aseguraba que iba “a detonar una comisara de polica”.

Adems, tambin se jact de haber fabricado TNT, plvora o nitroglicerina y mostr su deseo de “tener un misil de azcar, nitrato de potasio o perxido de acetona”. “Mrtir, si Dios quiere”, le envi a uno de sus contactos junto a una foto de l mismo.

El juez de Menores indica en el fallo que el menor no tena amigos ni apoyo social de su entorno, contando con distintos conflictos de convivencia. A nivel personal, asegura el magistrado, estuvo expuesto a situaciones de violencia grave e importantes carencias de necesidades bsicas.

Esas circunstancias, a su juicio, han configurado “una personalidad que se caracteriza por una elevada dureza emocional y cognitiva y una normalizacin de la violencia”. El menor, recoge el fallo, se muestra resentido y presenta una elevada percepcin de injusticia y de conflicto social, lo que le lleva a tener “un nivel elevado de indiferencia” hacia la sociedad.





Source link